¿Realidad o Ficción?

Mis queridas flores, hoy me han invitado junto a otros dos peluqueros de prestigio a testar unos productos totalmente ecológicos. Estos productos apareceran en el mercado en el mes de Septiembre y seguro que hará las delicias de todas aquellas personas con espiritu sostenible.
No puedo daros toda la información, cómo es lógico,  pero sí daros mi sensación al realizar los test.
En primer lugar deciros que todos los productos no pueden ser cien por cien ecológicos, ya que el simple hecho de tratar el agua para que no se descomponga evita ese porcentaje…
En segundo lugar os diré que mi test ha sido realizado en una de las tres categorías que se nos ofrecía. En mi caso sobre un cabello sensibilizado y dañado. Mi modelo tenía un cabello muy denso y áspero,  fruto de múltiples decoloraciones.con una sensación rugosa de medios a puntas,con un largo de media melena, carente de capas Ideal para un test omprometido.
Los productos que vamos a testar son para utilizar en zona de aguas. (Champú, acondicionador, y unas mascarillas).
También un aceite para después. Por secreto profesional no puedo deciros los componentes. Pido disculpas.
Ahí va mi experiencia…
Me dispongo a lavar, humedezco el cabello y pongo en mis manos el champú eco. Su densidad es perfecta. Reparto por toda la palma buscando sensaciones…
No huele lo suficiente, me esperaba más, esperaba más perfume, no sé. Bueno, voy a emulsionar el producto con el pelo…parece que bien.
Que bien lava, me encanta esa sensación de limpieza, pero no tengo la sensación de que me esté tratando el pelo de una manera cosmética.
Enjuago abundantemente y pongo el segundo champú. Al igual que el primero tengo una buena cantidad de espuma,(aspecto que valoran clientes y profesionales). Comento ésto,  porque es dificil de conseguir con productos que no contienen sulfatos. Sigo teniendo la sensación de que, el trato es insuficiente. Estoy esperando ese tacto que proporcionan las ceramidas,las siliconas…
Enjuago con agua abundante y observo que el cabello está limpísimo, cosa que agradezco y me encanta.
Se hace indispensable utilizar una mascarilla. En este caso vamos a trabajar una arcilla. Textura nueva, más gruesa.
Se hace necesario calentarla con las manos para una mejor distribución. Este cabello se bebería el agua de los océanos jjjjjjjjaaaaa.
Posiciono el producto y emulsiona bien…Más lento que otros que conozco, pero bien. Sigo sin tener la sensación de perfumes asociados a las sustancias que componen este tratamiento. Tengo la opinión de que esta arcilla es para trabajarla profesionalmente.
Aclaro el cabello con agua abundante y observo que el cabello está limpio y tratado.
Cuando paso a mi modelo al tocador y me dispongo a desenredar,  observo que se realiza con facilidad, genial. Ahora voy a secar el cabello…
La sensación es cada vez mejor. Estoy percibiendo que con la ayuda del calor, el cabello se disciplina mejor. Seco todo el pelo y ahora pongo el aceite en medios y puntas. Este aceite se parece en texturas y aromas a los aceites solares. El cabello se peina bien, la cutícula cerrada y adquiriendo brillo a cada golpe de cepillo. Ooooooooh una rima, jjjjjaaaa.
Finalizo con un poco de aceite, a modo de serum, sellando medios y puntas. Ok, prueba superada.
Mis compañeros de test han tenido una estupenda sensación.

Mi conclusión:

La percepción que actualmente tenemos con los productos tratados quimicamente es que nos solucionan la papeleta diaria más facilmente. Nos seducen a través de los sentidos:.

La vista; Ensalzan los colores para hacerlos más apetecibles.
El olfato; Perfumes que inhalan nuestras fosas nasales trasladándonos a lugares exóticos.
El tacto; Sensaciones de algodón al tocar el cabello..

La ciencia ha puesto en nuestras manos mecanismos de confort, dificilmente rechazables…
Lo que no teníamos tan claro es que con estos mecanismos, nos estamos cepillando el planeta.

La realidad de los productos ecólogicos es que no tienen un color atractivo, ni huelen tanto, ni tienen ese tacto al que nos han acostumbrado.
Parece que el camino correcto va por utilizar otros recursos , y no me cabe duda que la naturaleza nos lo va a ofrecer…eso sí, tiene una competencia feroz.
Ocurre lo mismo con los alimentos ecológicos.(Algo habremos hecho mal al llamarlos así). Frente a la manzana ecológica de aspecto arggg, la manzana brillante del súper carente de sabor. Tú que eliges, ¿realidad o ficción?